La política esta presente en todas las situaciones de la vida, en el vaivén diario, en el día a día. Siguiendo esta premisa, los seres humanos hacemos política durante toda nuestra vida, en todas las ocasiones, durante todo el tiempo. Ejemplos comunes hay muchos tales como: Un fuerte apretón de manos, un saludo a voz gruesa, un gesto facial de desagrado, una forma particular de sentarse, etc. La política forma parte de la vida y es gracias a ella que nos comunicamos de la forma en que queremos hacerlo. En conclusión, todo ser humano tiene sus propias políticas o normas de vida.
Esta característica es usada en gran medida por la gente de ideología caviar que identifica a los ciudadanos de derecha como "fachos" los llaman así porque esa es la forma de etiquetar a aquellos hombres de pueblo y aquellos que no lo son. Por supuesto ellos alegan ser del pueblo, jamás dirán que se sirven de él y que sin la miseria de muchos, ellos no tendrían más remedio que volverse competitivos o llegar al suicidio.
Un caviar jamás "cholea" (al menos en público) pero si puede tildar de "pezuñentos" (pregúntenle a Patricia del Rio) a otros porque esa es su naturaleza. Un caviar suelta insolentes amenazas cuando pretenden vacarlo por incapacidad y busca ensuciar el proceso de revocatoria llegando a la manipulación mediática o a argucias de "estupidez humana".
Un adolescente confundido y ebrio además de estúpido es ridículo y causa pena (por sus pocas neuronas) cuando es capaz de expresar frases como: !Me llega al pincho tu cámara! !chólo de mierda! !Me llega al pincho tu jato! !cholo de mierda!, un infeliz como ese no puede sino esperar indulgencia social para evitar ser apabullado en un país en el que el término "cholo" emana de los poros de sus propios ciudadanos.
¿Pero que se podría esperar de un pobre infeliz que tiene el cerebro reducido producto del alcohol y la estupidez heredada por sus propios padres?
La respuesta es sencilla a esta pregunta, nada. Los infelices siguen siendo infelices aunque los payasos hagan gestos, así como los estúpidos siguen siendo estúpidos aún cuando se juran "superiores" y sólo producen pena y un efecto vomitivo. Este mocoso merece ser castrado socialmente y expectorado como la más nauseabunda y asquerosa de todas las flemas.
Este país nos pertenece a nosotros los cholos.
La Nueva Derecha, la Derecha Popular, esta integrada por todos los cholos, los power, los progresistas, los que dejamos la piel por el país, los que la luchamos aún cuando todo parece perdido. Somos la nueva clase media, la clase emergente, la locomotora del país.
Por ello el móvil de este texto que, busca resaltar los rasgos de todo aquel miembro de derecha para que pueda reconocerse como tal y aplicar la ideología que lo identifica sin tapujos, sin reservas y con pasión.
El buen derechista
Un buen ciudadano, un ciudadano de derecha no comete la estupidez de "cholear" a sus semejantes porque eso refleja la escasa educación cultural de él mismo y de sus padres. Un ciudadano de derecha saluda y sonrie a cada persona con la que se cruza en su andar diario porque todos juntos somos sociedad y nos necesitamos mutuamente.
En ese contexto; el grifero, el panadero, el lechero, el trabajador del peaje, el emolientero, todos merecen una sonrisa.Cuando un derechista sonrie a sus semejantes deja una estela de luz en su camino logrando incentivar a otros a hacer lo mismo y a seguirlo como ejemplo.
Un buen ciudadano de derecha valora el trabajo de los demás y lo reconoce públicamente.
El buen derechista no se queda en la crítica, innova, pregunta, indaga, resuleve y suigere nuevas formas para superar los impases.
El buen derechista es competitivo y busca granejarse un futuro con mérito propio, sin padrinos.
El buen derechista repudia a los grupos caviar y educa con afán a sus hijos al relatarles la historia del país y de como Sendero Luminoso nos jodió la infancia, la adolescencia o la adultez haciendo que todo sea más gris, más incoloro.
El buen derechista se informa, lee, comenta y comparte sus conocimientos con quienes están menos informados, logrando así formar una cultura informativa que forma una barrera de resistencia intelectual a las mal intencionadas informaciones de los grupos caviar.
El buen derechista participa en todas las marchas a favor de la paz, la gobernalidad, el respeto al estado de derecho y el repudio a los Gregorio Santos, Mollohuanca y demás.
El buen derechista, el derechista popular no aplica sistemas de monopolio porque entiende que eso genera desigualdad social.
El buen derechista microempresario no elude impuestos, los paga y otorga los beneficios que le corresponden a sus trabajadores.
El buen derechista universitario, se informa, lee y comenta en su facultad y círculos de estudio las bondades del libre mercado y como este sistema pude suprimir la pobreza.
El buen ciudadano de derecha tiene conciencia social y suele putear a quien tira papeles al suelo, orina en la vía pública o le hecha porras al Partido Comunista del Perú y hace apología al terrorismo.
El integrante de la Nueva Derecha, la Derecha Popular, se refiere a sus semejantes en el grado de Hermano.
La Nueva Derecha, la Derecha Popular simboliza la nueva sangre política del país, la nueva fuerza que empuja los hilos de la nación hacia el progreso, el desarrollo y la igualdad social. Quienes somos de derecha sabemos que la lucha es ardua, que los obstáculos son muchos pero de la misma forma sabemos como vencer, como perseverar y triunfar.
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